Arbúcies se llena de flores

Hola!

Como ya os informé, este pasado domingo se hizo el ya tradicional concurso de alfombras de flores en Arbúcies.

Es ya una tradición en que mucha gente del pueblo se vuelca año tras año con mucha ilusión.

Hay un trabajo previo que nadie ve. Primero se tiene que escoger el diseño que se hará. Una vez escogido se decide si la alfombra se dibuja directamente o si bien se tienen que hacer unas plantillas que ayuden al marcaje. Después, a buscar la materia prima o sea, la flor y otros ingredientes de la naturaleza. Durante un mes se van recogiendo aquellas plantas que se pueden ir guardando  (como pino, bruc...) y se van deshojando cada día un poquito entre todos. Este trabajo lo hace muy agusto sobre todo la gente mayor. La flor propiamente dicha no se va a recoger hasta el día antes porque no se conserva bien.

El día antes del concurso una brigada de personas adultas y niños, se dedican a ir a buscar flor. Como cada año la festividad se celebra en una fecha diferente, no siempre se encuentra la flor que se quiere. Por ejemplo este año la acacia, ha florecido muy temprano en la costa y se ha tenido que ir a la zona de montaña más alta para poder encontrarla. La mejor hora para recoger la flor es antes de la hora de calor, así que no es extraño encontrar personas a las 6 de la mañana desflorando árboles y arbustos.

Por la tarde se empieza a marcar la alfombra con ceras y no con tiza para que no se borre por la noche si lloviera. Primero se marcan los dibujos de las plantillas.

Luego otras personas van detrás ultimando los detalles.

Los niños pequeños de nuestra alfombra también hacen la suya infantil. Mirad que bien empiezan a aprender y a asimilar el trabajo  para cuando ellos sean los que hagan la alfombra grande.

Una vez marcada, solo queda esperar al día siguiente. Y a las 7 de la mañana todos arriba. Este año nuestra alfombra tenía un dibujo que se repetía por lo qual, primero hay que hacer una muestra de flores con el primer dibujo para ver cuanta flor se gasta y poder coordinar bien los colores y calcular la cantidad de flor.

La flor preparada... hay personas que se encargan de ir llenando las cajas y cubos que van quedando vacíos.

Una vez se tiene todo claro, se reparte el trabajo y todo el mundo sabe que tiene que hacer.

Hubo un ratito que empezó a llover, pero a nosotros no nos asusta la lluvia y continuamos trabajando.

Mientras, hay personas que van preparando el combustible para repostar jajajaja... Nosotros cuando hemos hecho la mitad de la alfombra, hacemos un descanso para desayunar.

Poco más de la mitad de la alfombra, este año ya es el tercero, colocamos el "Pont Vermell" (Puente Rojo) que es una réplica en miniatura de uno que hay en el pueblo.

Este año decidimos colocar unos espejos en los laterales para que la gente pudiese jugar con las fotografías.

Mirad que bonita va quedando.

Cuando más o menos se ha perfilado toda la alfombra, los artistas hacen el motivo anual y común que todo el mundo coloca en sus alfombras. Este año iba dedicado al 40 aniversario de los "Gegants" de Arbúcies, por lo que se dibujó el campanario de la iglesia y los tres muñecos de la Vila.

Mirad como quedó con los detalles de espejos que colocamos encima de las flores. No sé si los podeis apreciar.

Cuando ya sabemos la flor que nos sobra, los pequeñines empiezan a hacer su alfombra infantil.

Y mirad que rebonita les quedó.

Cuando las dos alfombras están acabadas, nos hacemos la foto de rigor.

Este año nuestro esfuerzo ha hecho que consiguiéramos el premio a la variedad de flor. En total colocamos 23 diferentes.

Haciendo una vuelta por las calles pudimos ver auténticas maravillas hechas con mucha ilusión.

Había muchas más. Pero fijaros en la que ganó y que a vosotras amigas quilteras os hará mucha ilusión. Os pongo una muestra de los motivos que podíamos admirar en la alfombra ganadora.

Paralelamente al concurso de alfombras había diferentes rincones de arte por todo el pueblo que eran una maravilla. Aquí podeis ver algunos:

Pero a mi me gusto este pequeño detalle de uno de los rincones...

El conjunto del rincon quedaba así, fijaros en la falda del maniquí, está hecha de flores.

Y en la plaza de la iglesia y alrededor de un platanero centenario, verdaderos cojines de patchwork hechos con flores.

Por la tarde llovió a cántaros y la calle parecía un río llevándose por delante todas las maravillosas alfombras; pero la satisfación de haber contribuido a crearlas quedará siempre en el recuerdo y en nuestros corazones.

Feliz Jueves.