Más regalitos y tutorial guarda-llaves

Pues el regalito del que os hablaba para los otros 7 profesores que intervenían en la educación de mi hijo mayor, son unos llaveros de patchwork. Concretamente guarda-llaves.

Os explico como los hice yo. Primero rebusqué entre los trocitos de tela que todas guardamos de los restos de los trabajos y seleccioné las posibles combinaciones para los 7 llaveros.

Estos llaveros pueden ser de diferentes motivos. Yo como no tenía mucho tiempo, los hice sencillitos y el motivo fue una casita.

Por si no se entiende muy bien, en el tejado, los 3,5 cm son de la linea vertical, no de la linea que hay debajo de la medida.

Primero corté unos rectángulos para los tejados y otros para la fachada de la casa y los uní como podéis ver en la foto.

Marqué la mitad de la tela en las dos casitas para poder orientarme a la hora de colocar ventanas y puerta.

Luego corté en fieltro las ventanas y la puerta. Las coloqué con agujas, más o menos, sobre la tela y después las cosí.

A continuación hice un patrón en plástico de la casita y por detrás de la tela lo marqué. En la telita que estaban las ventanas y la puerta cosida, esta última me servía de guía para colocar el centro de la casita.

Seguidamente coloqué buata, del derecho la tela que quedaría como forro interior y del revés la tela de la casita. Hice lo mismo con las dos piezas.

Luego pasé un repunte a máquina dejando la parte de abajo abierta y corté todo lo que sobraba a medio cm de margen.

Di la vuelta a las dos piezas y cosí a punto escondido los bajos de estas.

Ahora solo queda encarar las dos piezas y coserlas a punto escondido. Recordad dejar la parte de abajo abierta para guardar las llaves y en el tejado tenéis que dejar sin coser el espacio suficiente para dejar pasar la cinta que recoge las llaves dentro.

Por último compré bies negro, le pasé un repunte y cosí una anilla que compré en la ferretería.

La pasé por el agujerito del tejado con la ayuda de un imperdible y en el extremo opuesto a la anilla le puse dos redonditas de fieltro encaradas y cosidas para hacer de tope con la casita. Aquí podéis hacer corazoncitos o lo que se os ocurra. Yo fui por la vía rápida e hice solo redonditas.

Y aquí las tenéis a todas.

Pues estos llaveritos junto con la funda de libreta fueron los regalos cuyo destino fue la escuela Ventijol de Blanes.

Y para los otros dos tutores, compañeros míos de trabajo, fueron estas otras dos funditas para sendas libretitas de notas.

Adolf es un enamorado del cine y a Rosa Maria pensé que las Gorjuss le gustarían.

Y me consta que les ha gustado porque ya me han hecho llegar su agradecimiento. Y yo he disfrutado muchísimo haciéndolas.

Feliz Lunes.